La pandemia del COVID-19 ha golpeado al mundo, a nuestro país y con mayor dureza a las Islas Galápagos, Patrimonio Natural de la Humanidad, y reconocido destino turístico del Ecuador que ahora está aislado y con la mayoría de sus actividades paralizadas.
La Cámara de Industrias y Producción (CIP) expresa al Gobierno Nacional y a la ciudadanía su preocupación por la crisis en la que se encuentran las actividades productivas, el empleo y la población del archipiélago.
La CIP reconoce la importancia y oportunidad del plan del Gobierno para socorrer a las familias galapagueñas en situación crítica, con apoyos económicos y de gestión para impulsar las actividades locales, así como el anuncio de que el Banco de Desarrollo del Ecuador (BEDE) concederá créditos para atender necesidades apremiantes de los gobiernos autónomos descentralizados.
Además, el gremio propone que se trabaje en la discusión y ejecución de un Plan Integral de Desarrollo que considere el impulso a las actividades productivas propias de Galápagos, que sostengan y dinamicen las actuales inversiones o atraigan nuevas dentro del marco del desarrollo sustentable, el mejoramiento del empleo y la operación logística, con participación público-privada, para potenciar la conservación y el turismo en las islas.
Este Plan debe considerar particularmente la implementación de medidas que mejoren las condiciones de empleabilidad de la población del archipiélago. Así se romperán las brechas actuales de competencias, con el propósito de que los servicios, especialmente de turismo, sean prestados preferentemente por residentes permanentes. Sin embargo, será imprescindible mantener recursos humanos especializados, de cualquier origen, para sostener el nivel turístico en Galápagos, la seguridad de sus operaciones que, junto a su riqueza natural, caracterizan a las islas como el primer destino turístico del Ecuador y uno de los más reconocidos del mundo.